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Aunque oficialmente no estemos en verano, la realidad es que ya hace días que está haciendo calor, las playas se van llenando y el sol quema con más fuerza. En este blog os hemos hablado en numerosas ocasiones de la necesidad de proteger bien la piel de los rayos solares y de algunos de los productos que puedes usar para ello. Pero ¿sabes realmente que protector solar es el adecuado para tu piel? Hoy, desde Coosmetic te damos 7 claves que te ayudaran a elegirlo...
Ente las personas con necesidades especiales están:
Está probado que ingredientes como el óxido de zinc o el dióxido de titanio resultan eficaces en la prevención de los efectos negativos del sol, ya que son capaces de reflejar los rayos UV sin que estos sean absorbidos por la piel. Otros ingredientes químicos como Mexoryl SX, Mexoryl XL y Parsol 1789 protegen contra los rayos UVA y Octinoxato, Octisalate y Homosalato contra los rayos UVB.
Y ¿qué significa esto? Pues indica que el producto en cuestión es eficaz tanto contra los rayos UVB (rayos ultravioleta B que causan quemaduras en la piel y contribuyen a la aparición de un cáncer) y los rayos UVA (rayos ultravioleta A que agravan el envejecimiento de la piel causando arrugas, manchas y cáncer de piel). Piensa que la luz del sol emite hasta un 95% de rayos ultravioleta A y alrededor de un 5% de rayos ultravioleta B.
Cuanto más alto sea el factor de protección mejor, sobre todo para las pieles mas pálidas, pero no creas que una crema con SPF30 protege el doble que una de SPF15, ni mucho menos. Una crema con SPF15 de protección solar bloquea el 93% de los rayos UVB, con SPF30 bloquea el 97% y con SPF50 bloquea el 98%. Ninguna crema, ni aquellas con SPF50+, puede bloquear el 100% de la energía solar. El SPF se calcula en base al tiempo que necesita el sol para ocasionar quemaduras sobre una piel con crema protectora.
Un protector solar resistente al agua (water resistant, en inglés) ofrece 40 minutos de protección solar ante la piel húmeda o rodeada de agua, y un protector impermeable (waterproof, en inglés) ofrece 80 minutos. Además, recuerda que debes darle a tu protector 30 minutos desde su aplicación para que sea totalmente efectivo, por lo que no vale untarse de crema y zambullirse de inmediato.
Para una exposición ocasional al sol de pocos minutos es suficiente la crema más básica (con SPF15, que no sea resistente al agua, etc.) pero para una exposición prolongada en la que encima vas a estar en el agua, procura usar (y cada pocas horas) una protección alta y resistente, independientemente de que creas que ya no te quemas.
Última clave, aunque no por ello la menos importante, debes decidirte entre un bote grande o pequeño, crema o spray, caro o barato, si te gusta su esencia, su textura, etc. No sirve de nada adquirir un protector solar que se va a quedar en el armario.
Recuerda estas sencillas claves cuando vayas a adquirir tu protector solar y no olvides tomar otras precauciones este verano, como usar un sombrero y gafas adecuadas, ropa protectora y tener siempre una espacio de sombra cerca para dar un reposo a tu piel.